La enseñanza del tiempo en Educación Infantil



En primer lugar, se hace indispensable discernir entre dos tipos de tiempos:

  • Tiempo histórico: hasta principios del siglo XX era,
    prácticamente, sinónimos de tiempo cronológico, ya que la historia se concebía como hechos o acontecimientos lineales que había que fijar con precisión a través de la cronología. 
     
  • Tiempo cronológico: nace del tiempo histórico, y a su vez, ayuda a los historiadores a percibir los diversos tiempos de la historia.

Referente a la enseñanza de los mismo, en el primer caso, en el tiempo histórico, es necesario que el alumnado construya la sucesión de los hechos, usando de forma adecuada las periocidades como Prehistoria, Edad Media…, conociendo también los conceptos de larga, media y corta duración.

En cuanto a la enseñanza del tiempo cronológico, hemos de programar, diseñar y realizar actividades de aprendizaje mediante las cuales, progresivamente, el niño vaya construyendo conceptos de medida de la temporalidad.



Según Jean Piaget, los niños perciben el tiempo progresivamente en tres grandes etapas:


El tiempo vivido corresponde a las experiencias directas de la vida. Es inicialmente un mundo confuso y mal organizado que no discierne con nitidez ni el orden temporal (antes, ahora y después) ni las relatividades de las posiciones (simultaneidad, alternancia o sucesión), ni tampoco de las duraciones. El niño parte en su aprendizaje de esta confusión inicial para ir construyendo poco a poco la idea de tiempo en contacto con la experiencia de cambios concretos (ritmos biológicos de su cuerpo, desplazamientos de un lugar, sufrimientos o bienestar…). Desde la experiencia vivida, les acompañaremos didácticamente hasta el tiempo percibido en relación a su espacio, y finalmente, les ayudaremos a construir la adquisición del tiempo concebido.



El aprendizaje del tiempo en la escuela consiste en proporcionar actividades que permitan que los niños sean capaces, progresivamente de:



  • Tomar conciencia de su tiempo personal (los ritmos: categorías de frecuencia y regularidad).
  • Construir la orientación temporal (sucesión: categorías de presente, pasado y futuro).
  • Edificar la posición (simultaneidad y duración – cambios y permanencia).


Bibliografía
  •  Antúnez Marcos, S. y otros. (1998). El tiempo y el espacio en la didáctica de las Ciencias Sociales. Barcelona: Graó.