Calendario de Lilliputiens

La enseñanza del tiempo en la etapa de Educación Infantil siempre ha sido un tema complejo, ya que está formado por aspectos muy abstractos que los niños no asimilan correctamente debido a su corta edad.

Para llevar a cabo esta enseñanza, hemos de conocer que los peques perciben el tiempo en tres etapas según Jean Piaget.

 El tiempo vivido corresponde a las experiencias directas de la vida. Es inicialmente un mundo confuso y mal organizado que no discierne con nitidez ni el orden temporal (antes, ahora y después) ni las relatividades de las posiciones (simultaneidad, alternancia o sucesión), ni tampoco de las duraciones. El niño parte en su aprendizaje de esta confusión inicial para ir construyendo poco a poco la idea de tiempo en contacto con la experiencia de cambios concretos (ritmos biológicos de su cuerpo, desplazamientos de un lugar, sufrimientos o bienestar…). Desde la experiencia vivida, les acompañaremos didácticamente hasta el tiempo percibido en relación a su espacio, y finalmente, les ayudaremos a construir la adquisición del tiempo concebido.

El aprendizaje del tiempo en la escuela o en casa, consiste en proporcionarles actividades que permitan que los niños sean capaces, progresivamente de:

• Tomar conciencia de su tiempo personal (los ritmos: categorías de frecuencia y regularidad).
• Construir la orientación temporal (sucesión: categorías de presente, pasado y futuro).
• Edificar la posición (simultaneidad y duración – cambios y permanencia).

Y para ello, nosotros contamos con el calendario de Lilliputiens. Lo podéis encontrar en diferentes idiomas. El nuestro está en francés, ya que desde que estuvimos en París, nos hemos propuesto reforzar este idioma y es una buena manera de inculcárselo también a nuestro hijo.

Es de tela y consta de:

• 3 marcadores para la semana (ayer, hoy y mañana).
• 1 marcador de fecha.
• 12 fichas ilustradas de actividades y una más para pintar lo que deseemos,
• 6 fichas ilustradas del clima.
• 5 fichas ilustradas de estado de ánimo y emociones.
• 5 tarjetitas para escribir el año.
• Asa para colgar.
• Un bolsillo con velcro para guardar mejor las fichas que no usemos.
• Una rueda central para ayudarnos a descubrir el mes y la estación en la que nos encontramos.

Además de ello y, como siempre, el acabado del calendario es perfecto. Con tonos muy atractivos que hacen más fácil el aprendizaje y con piezas y materiales que no entrañan peligro para los niños. Es muy fácil de manejar y les ayudará también a trabajar la motricidad fina. Esperamos que os guste tanto como a nosotros.

Gracias de nuevo por confiar en nosotros. Estamos encantados con este material.