Granola casera

 Hacía tiempo que queríamos probar a hacer nuestra propia granola y por fin nos hemos animado. El resultado final ha sido increíble y por ello os compartimos nuestra receta. 

En 1863, en Estados Unidos, James Caleb Jackson creó una mezcla de cereales a la que llamó "granula". Surgió en un momento en el que se comenzaba a apostar por una nutrición menos procesada y más natural.

Creemos que no hay mejor acompañamiento para este desayuno que una buena lectura. En este caso, yo tengo entre manos esta obra de Astrid Lindgren, Pippi Calzaslargas, que me ha devuelto a mi infancia desde la primera frase que he leído.



Ingredientes:

- 200g de copos de avena

- 100g de frutos secos (nosotros hemos usado avellanas, nueves, pipas de girasol y pipas de calabaza)

- 45g de de aceite de coco o aceite de oliva

- 50 g de sirope de arce (o en su defecto miel o azúcar moreno)

En ocasiones, también se suele añadir un poquito de extracto de vainilla y canela, pero nosotros no lo hemos usado y nos ha gustado la receta así un poquito más simple.

Elaboración:

1.- Precalentamos el horno a 170º.

2.- Mientras se precalienta, en un cacito calentamos el aceite con el sirope de arce (y también la canela y la vainilla en el caso de queráis añadirlo). No ha de hervir, sólo han de integrarse los líquidos.

3. Una vez templada la mezcla, reservamos y en un bol, colocamos todos los frutos secos junto con los copos de avena y mezclamos todo.

4. A continuación, vertemos el líquido reservado en el bol sobre la avena y los frutos secos y mezclamos bien.

5.- Colocamos un papel de horno sobre la bandeja de horno y sobre ella, extendemos toda la mezcla de ingredientes que tenemos ya en el bol y esparcimos por toda la bandeja.

6.- Lo introducimos en el horno unos 20-30 minutos (en función de cada uno) y cada 5minutos, lo abrimos y movemos la mezcla con la finalidad de que se tueste de forma uniforme.

7.- Una vez haya adquirido el tono deseado y esté todo tostado, sacamos la bandeja y dejamos enfriar nuestra granola en la misma.

8.- La colocamos en un tarro y ya la tenemos lista para añadir a nuestros yogures o cualquier desayuno.

* En casa, solemos hidratar un poquito los frutos secos. Por ello, antes de elaborar esta receta, dejamos todos los frutos secos en un platito con agua con la intención de eliminar toxinas y activarlos. Veréis que el agua cambia de color y se vuelve marrón. Este agua se deshecha y al estar más hidratados, conseguimos que se activen diversos nutrientes que nos permitirán absorberlos mejor.